· Tampoco es necesario que la incineración de ningún fallecido tenga que realizarse fuera de Madrid
· Una vez superada la saturación que han sufrido las empresas funerarias en las últimas semanas, se vuelve a estar en condiciones de prestar los servicios funerarios dentro de los plazos habituales, que en ningún caso deberían superar las 48 horas
Después de varias semanas en las que las funerarias de la Comunidad de Madrid se han visto desbordadas por el incremento de fallecidos debido al Covid-19, Parcesa anuncia que las unidades de cremación con las que se cuenta en Madrid capital y en el resto de la Comunidad, permiten atender a las familias sin retrasos en la realización de incineraciones.
Las instalaciones existentes en Madrid y las que tiene esta empresa funeraria en la Comunidad de Madrid (el Tanatorio Parcesa La Paz de Alcobendas, el Tanatorio Parcesa M40 y el Tanatorio Parcesa Villalba) están en condiciones de proporcionar a los allegados del fallecido una despedida digna en el plazo de 24-48 horas, sin tener que sufrir el dolor de largas esperas. Este servicio da cobertura a todas las personas, independientemente de la causa del fallecimiento -Covid-19 u otra- y del lugar donde se produzca -hospitales, residencias, domicilios particulares o desde cualquier otro.
Una vez superada la saturación que han sufrido las empresas funerarias en las últimas fechas, se vuelve a estar en condiciones de prestar sus servicios dentro de los plazos habituales, que en ningún caso deberían superar las 48 horas.
Tampoco es preciso esperar para enterrar a un ser querido, una opción que en el Parque Cementerio de La Paz (situado en la carretera de Colmenar) se ha atendido con prontitud, incluso en los momentos más complicados de la actual crisis sanitaria.
Tal y como marcan las autoridades sanitarias, se están realizando entierros en sepulturas y nichos con un máximo de tres acompañantes para evitar acumulaciones y garantizar unas condiciones seguras en el último homenaje. Igualmente, hasta tres miembros de cada familia pueden acudir a ver el comienzo de la cremación.